1. Conoce los diferentes tipos de tangas. Si eres principiante en el tema de las tangas, probablemente has escuchado el lenguaje relacionado, pero no tienes ni idea de lo que significa. Hay tres estilos generales de tangas: la tradicional, el hilo dental y la tanga brasileña.
2. Comprende cómo se siente usar una tanga. Una de las muchas preocupaciones de las personas que no usan tangas es si se siente incomodidad o no. Aunque la idea de deslizar un pedazo de tela entre los glúteos suena como a la broma del calzón chino, la mayoría de las personas que usan tanga coinciden en que la molestia inicial se supera casi inmediatamente. Con frecuencia, las tangas se consideran uno de los estilos más cómodos de ropa interior, especialmente los hilos dentales, porque hay muy poca tela como para que pueda amontonarse, aflojarse o sentirse incomodidad de alguna forma.
3. Prueba las tangas hechas de diferentes telas. No todas las tangas se hacen por igual. Al igual que las bragas normales, hay una gran cantidad de telas, colores y diseños para elegir. Cuando se trata de tangas, en general se recomienda que busques tangas de algodón, ya que permiten pasar más el aire. Sin embargo, algunas opciones comunes son las de encaje, seda y satén. Las tangas de encaje funcionan bien para minimizar la apariencia de la grasa que se derrama sobre la cintura de los pantalones o las faldas al usar ropa ceñida, ya que el encaje es muy elástico y disimula la apariencia. Las tangas de seda y satén normalmente son lencería reservada, pero sin duda son una opción para esos días en que quieres sentirte más sexy de lo habitual.
4. Usa una tanga cuando no quieras que se vea la línea de la ropa interior. Las tangas se usan normalmente para evitar que se vea la línea de la ropa interior al usar pantalones, vestidos o faldas ajustadas. El problema con la mayoría de la ropa interior es que sin importar lo delgado que sea el material, casi siempre se puede ver el contorno del dobladillo a través de las prendas ajustadas. Una tanga es la solución, ya que los pantalones casi nunca son tan ajustados en la parte delantera como para que se vea el contorno frontal, pero en la parte de atrás el dobladillo está bien escondido entre los glúteos.
5. Asegúrate de que la tanga no se asome por encima de la línea de la cintura.Siéntate, agáchate, ponte en cuclillas y haz otros movimientos similares frente al espejo para comprobar si la tanga queda visible. Si se repite este problema que se conoce como "cola de ballena", puedes probar con otra talla o modelo, evitar los jeans de cintura baja, usar un cinturón o simplemente cubrir esa área con una camisa larga. Aún así, es bueno que te prepares para hacer un ajuste rápido mientras estés en público. Al sentarte, toca sutilmente la parte trasera de la línea de la cintura y comprueba si se asoma la tanga. Si está expuesta, métela rápidamente de nuevo y jala la camisa hacia abajo para cubrir el área.